DIÁLOGO ENTRE NEO Y EL ORÁCULO

Oráculo:
Adelante, no temas no voy a morderte. Acércate y déjame que te vea. Madre mía ¡fíjate! el tiempo te ha tratado bien, eh!; ¿Cómo te encuentras?

Neo:
Yo… eh...

Oráculo:
Sé que no consigues dormir, ya hablaremos de eso. Ven esta vez siéntate a mi lado.

Neo:
Prefiero quedarme de pié.

Oráculo:
Cómo tu quieras.

Neo:
Me ha apetecido sentarme.

Oráculo:
Lo sé. Oye... ¿Qué tal si empezamos con las obviedades?

Neo:
No eres humana, verdad?

Oráculo:
Sería dificil encontrar una obviedad mayor.

Neo:
A mi entender; tu eres un programa del mundo de las máquinas. Igual que él (refiriéndose al chino de la pelea anterior)

Oráculo:
Vas bien encaminado...

Neo:
Pero si eso es cierto, formas parte de este sistema. Otra forma de dominio.

Oráculo:
Continúa.

Neo:
Supongo que la pregunta más obvia es SMITH: ¿Puedo confiar en ti?

Oráculo:
Premio.

Es un conflicto, de eso no hay duda. Lo malo de la situación es que no tienes modo de saber si he venido a ayudarte o no; tu eres el que decide. Tu puñetera cabecita tiene que decidir si acepta lo que voy a decirte... o lo rechaza.

Neo:
Tu ya sabes si voy a aceptarlo.

Oráculo:
¡Menudo oráculo si no lo supiera!

Neo:
Pero si tu ya lo sabes... ¿Cómo voy a escoger yo?

Oráculo:
Porque si estás ahora aquí no es para escoger, tu ya elegiste. Has venido para intentar comprender porqué lo hiciste.

A estas alturas ya deberías saberlo.

Neo:
¿Y a qué has venido tu?

Oráculo:
A lo mismo. Los caramelos me enloquecen...

-El Oráculo desenvuelve el caramelo y se lo introduce en la boca. El interior del caramelo también es rojo-

Neo:
Dime, por qué nos ayudas?

Oráculo:
Cada uno está aquí para hacer lo que tiene que hacer. A mi me interesa una cosa, Neo. El futuro. Y puedes creerme, el único modo de llegar a él es yendo juntos

Neo:
¿Hay más programas como tú?

Oráculo:
No, no hay ninguno COMO yo... -El oráculo señala al suelo- Mira.. ¿ves esos pájaros? Alguien tuvo que escribir un programa para controlarlos... del mismo modo existe un programa para regular los árboles, el viento, el alba y el ocaso. Hay programas funcionando en todas partes. Aquellos que realizan bien su cometido, su misión... son invisibles. No podrías saber si están aquí. Pero los otros... bueno.. siempre se oye hablar de ellos.

Neo:
Yo no he oído hablar de ellos.

Oráculo:
Claro que si; cada vez que has oído hablar a alguien de un fantasma o de un ángel, cada vez que has oído una historia de vampiros, hombres lobo o alienígena no es sino el sistema que asimila algún programa que anda haciendo lo que se supone que no debería hacer.

Neo:
-meditando- Programas... que piratean programas... ¿POR QUÉ?

Oráculo:
Pues tienen sus razones... Cuando un programa sabe que tiene que ser borrado suele preferir exiliarse.

Neo:
¿Y por qué se borra un programa?

Oráculo:
Quizás por que funciona mal.. quizás porque han encontrado uno mejor que lo reemplace; Pasa todos los días. Y cuando ocurre... el programa puede optar por esconderse aquí, o por regresar a la fuente.

Neo:
Al ordenador principal.

Oráculo:
Si. A donde tienes que ir tú. Allí muere el camino del elegido.

Tú ya lo has visto... en tus sueños ¿Verdad que sí? Una puerta hecha de luz... ¿Qué ocurre cuando cruzas esa puerta?

Neo:
Veo a Trinity... entonces pasa algo malo... algo MUY malo... Ella empieza a caer... y me despierto.

Oráculo:
la ves... ¿Morir?

Neo:
No.

Oráculo:
Neo, ahora puedes ver el futuro... estás contemplando un mundo atemporal.

Neo:
¿Y por qué no veo lo que le pasa a ella?

Oráculo:
No podemos ver más allá de las elecciones que no entendemos.

Neo:
¿Quieres decir que tengo que elegir si Trinity vive o muere?

Oráculo:
No... esa elección ya la has hecho. Ahora tienes que comprenderla

Neo:
No. No puedo hacerlo. No lo haré.

Oráculo:
DEBES hacerlo.

Neo:
¿Por qué?

Oráculo:
Porque eres EL ELEGIDO.

Neo:
¿y si no puedo? ¿Qué ocurrirá si fracaso?

Oráculo:
Entonces Zion desaparecerá.

Ya hemos terminado. Escúchame, puedes salvar Zion si llegas a la fuente, para eso necesitas al creador de llaves.

Neo:
¿Quién es ese?

Oráculo:
Es alguien que desapareció hace tiempo, no hemos podido averiguar su paradero. Se encuentra prisionero de un programa realmente temible. Y también uno de los más antiguos. Se llama Merovingio. No lo dejará marchar por las buenas.

Neo:
¿Qué es lo que quiere?

Oráculo:
¿Qué pretenden todos los hombres con poder? MÁS PODER.

Estate allí... a la hora que hay escrita... y tendrás una oportunidad.

Chino:

Oráculo:
Parece ser que cuando nos vemos; solo te doy malas noticias. Lo siento mucho, te lo digo en serio. Lo que es sorprendente es que has conseguido que crea en alguien. Te deseo suerte.

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